El uso desproporcionado de la fuerza contra una manifestación, en este caso el uso de gas lacrimógeno, configura una REPRESIÓN y constituye una grave violación a los derechos humanos.
El operativo implementado hoy en Mérida por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública para impedir una manifestación de inconformidad ante el primer informe de gobierno de Mauricio Vila, gobernador de Yucatán, incluyó violentar el derecho al libre tránsito y reprimir la protesta. Tenemos información de detenciones que se denuncian como arbitrarias.
No es la primera vez que este gobierno atenta contra los derechos ciudadanos en el contexto de manifestaciones.
Lo hizo también el 19 de septiembre pasado, en el marco de la Cumbre de los Premios Nobel de la Paz, cuando impidió el libre tránsito y el derecho a la manifestación de los Guardianes de los Cenotes de Homún, quienes se manifestaban pacíficamente y no pudieron acercarse al Centro Internacional de Congresos. En esa ocasión, también se impidió el acceso a activistas registrados previamente para participar en el evento.
El 25 de noviembre pasado se detuvo arbitraria y violentamente a 7 mujeres en el marco de la manifestación contra la violencia de género, antes de que iniciara la marcha.
Deploramos la violencia institucional, la represión, el uso desproporcionado de la fuerza, el atentado contra la libertad de expresión y de manifestación perpetrado hoy, 19 de enero, por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública, para impedir una manifestación de inconformidad en el marco del Primer Informe de Mauricio Vila, Gobernador de Yucatán.
Exigimos una investigación inmediata, sanción a los responsables y garantías de no repetición.Exigimos al gobierno del Estado una política de seguridad basada en el pleno respeto a los derechos humanos, que garantice todos los derechos a todas las personas. Protestar es un derecho, reprimir es un delito.
¡Ya Basta!
Equipo Indignación A.C.
Mérida, Yucatán, 19 de enero de 2020