En el día de los derechos humanos denunciamos que Yucatán atraviesa una crisis de derechos humanos. El número de denuncias por tortura en Yucatán es alarmante en un estado que presume de ser uno de los más seguros del país, situación que además es negada, encubierta y desatendida por las autoridades, incluyendo a la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán, la cual ha sido omisa al calificar la tortura y, de 2018 a 2020, únicamente ha emitido 10 recomendaciones por tratos crueles e inhumanos.
Los casos sobre tortura en Yucatán siguen impunes. Exigimos todas las acciones necesarias para erradicar la tortura, incluyendo un protocolo eficaz que permita descartarla o confirmarla, que se investiguen precisamente por tortura todas estas denuncias y que se sancione a los responsables de perpetrarla y de encubrirla.
¡Basta de tortura y de negarla!