Uno de los empleados de la Profepa que clausuraron los cenotes de kanan ts’ono’ot, fue nombrado por el juzgado segundo de distrito como perito en uno de los juicios de Homún, por lo que se intentó recusar a dicho perito y ante la negativa del juez se interpusieron dos quejas, las cuales se resolverán el próximo jueves 4 de julio en el Tribunal Colegiado en Materia Penal y Administrativa.
El juicio de amparo 1389/2017 fue promovido por kanan ts’ono’ot (Guardianes de los cenotes) para defender el derecho a un ambiente sano para los mayas de Homún al enfrentarse a una mega granja porcícola que se encuentra instalada en la zona de recarga de la “Reserva Geohidrológica Anillo de los Cenotes. Dicho juicio tiene lugar en el juzgado segundo de distrito en el Estado de Yucatán y es contra la Manifestación de Impacto Ambiental otorgada por la entonces Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma), ahora Secretaría de Desarrollo Sustentable, a la empresa Producción Alimentaria Porcícola S.P.R. de R.L. de C.V. (PAPO).
Para esto, el juez Rogelio Eduardo Leal Mota solicitó un peritaje a la Procuraduría Federal de Protección Ambiental (Profepa) con el fin de determinar si la autorización de la MIA transgrede o no el derecho a un ambiente sano, así como la afectación que pudiera haber en las aguas del anillo hidrológico.
La PROFEPA nombró como Perito al Biólogo Jesús Arcadio Lizarraga Véliz, quien desempeña el cargo de Subdelegado de Recursos Naturales de la Profepa y que fue uno de los funcionarios que acudieron a Homún el 21 de septiembre de 2018 cuando se clausuraron los cenotes de la directiva de Kanan Ts’ono’ot (Guardianes de los Cenotes), acto que denunciamos como represalia ante las manifestaciones que realizó el pueblo maya de Homún, así como por la clausura simbólica de la mega granja porcícola de la empresa Producción Alimentaria Porcícola S.P.R. de R.L. de C.V. (PAPO).
Ante esto, se intentó recusar a dicho perito debido a que claramente puede haber un conflicto de intereses. El juez no concedió la recusación del perito al afirmar que no tiene lugar ya que éstos no son recusables de acuerdo con lo que dice la Ley. Sin embargo, un perito que clausuró, junto con otros funcionarios de la PROFEPA, los cenotes de quienes promueven dicho juicio, es un acto de parcialidad que pone en riesgo el derecho a la salud del pueblo maya de Homún.
Debido a la negativa a la recusación del perito de la Profepa, se interpusieron las quejas 152/2019 y 162/2019, las cuales se resolverán el próximo jueves 4 de julio en el Tribunal Colegiado en Materia Penal y Administrativa bajo la ponencia del magistrado Jorge Enrique Eden Wynter García, la sesión dará inicio a la diez horas con cincuenta minutos. Los recursos de queja que se resolverán fueron interpuestos contra el nombramiento del perito nombrado por el Juez Segundo de Distrito, al ser dicho perito uno de los empleados de la Profepa y que clausuró los cenotes de Homún.
Kanan ts’ono’ot (guardianes de los cenotes) y el equipo de derechos humanos Indignación, alertamos ante el conflicto de intereses que pone en riesgo el derecho a un ambiente sano, en peligro el agua y, sobre todo, la salud del pueblo maya de Homún, en donde además se ha violado reiteradamente su derecho a la libre determinación.
También es importante recordar que este mismo juez fue quien en un inició negó dicho amparo, el cual tuvo que ser concedido por el Tribunal Colegiado en materias del Trabajo y Administrativa el cual señaló que era necesario reponer el procedimiento, es decir, que había que recabar pruebas nuevas, sin embargo, el perito de la Profepa que como ya dijimos participó en la clausura de los cenotes de Homún, no aportó pruebas nuevas y se limitó a señalar que la MIA no transgrede el derecho a un ambiente sano y a la salud, por el simple hecho de que ya había sido aprobada previamente por la Seduma. Advertimos el conflicto de intereses que pone en riesgo el derecho a un ambiente sano para el pueblo maya de Homún.